La conducción lleva siempre asociado el riesgo de sufrir un accidente de tráfico y muchos de estos accidentes tienen lugar durante la jornada laboral. Las medidas preventivas actúan sobre el mismo conductor, el vehículo y la vía a circular. Por tanto, la Seguridad Vial forma parte de la seguridad laboral de todo trabajador independientemente del sector al que pertenezca; y por este motivo, la formación específica en seguridad vial juega un papel fundamental.
La conducción preventiva o defensiva es un conjunto de técnicas sencillas y útiles que permiten al usuario al volante depender de su propio comportamiento para evitar accidentes, producidos por los actos incorrectos de otros conductores o el estado de la vía.
La conducción eficiente es un estilo basado en una actitud y un tipo de conducción que le permitirá obtener un mayor rendimiento energético en su vehículo. Para la correcta aplicación es necesaria una actitud del conductor basada en una mayor anticipación y la previsión al volante. Se constata además que, al aplicar las técnicas se logra una mayor concentración en la conducción y un mayor sosiego que repercute en una reducción del estrés del conductor.
Los objetivos de este curso son reducir al máximo el número de accidentes “in itinere” y “en misión” y las situaciones límite que se dan en la conducción; saber cómo actuar ante determinadas emergencias que pueden aparecer durante la conducción y concienciar sobre la importancia de una conducción responsable y segura a través de la descripción de las principales medidas preventivas que se deben aplicar en determinados aspectos críticos de la conducción.